Con la incertidumbre económica y la creciente renuencia a invertir en activos tradicionales como acciones, inmobiliário e incluso títulos de deuda (debido a las bajas tasas de interés), los inversores están comenzando a ver el arte como una forma de inversión viable y alternativa debido a su baja correlación con los mercados financieros.
Actualmente, la Street Art ha experimentado un gran crecimiento, su politización es atractiva para las generaciones más jóvenes de inversores, creando un fuerte enfoque en el futuro del movimiento. Artistas reconocidos internacionalmente, como Banksy, mueven grandes cantidades de capital, pero también generan una mayor demanda de otros artistas menos reconocidos (Efecto Banksy), lo que consolida la importancia de comprar al artista adecuado en el momento adecuado. Para eso es necesario estar consciente de las tendencias artísticas, las que tienen influencia artistas, coleccionistas, galerías y casas de subastas.
Invertir en arte seguirá siendo una tendencia sólida, el desarrollo de los artistas emergentes permite que los inversores tengan una gama mas amplia de bienes en que invertir. Para aquellos con menos fondos o que solo están en el proceso de crear su cartera, comprar grabados y litografías puede ser una buena inversión. Estos dos artículos son mucho menos costosos y también tienen un gran potencial de apreciación.